Tridente Corrupto

*La red de mafiosos es comandado por Aref Karam Espositos, director de Obras Públicas y amigo personal de Vila Dosal. Los funcionarios cobran entre 15 y 30 por ciento del total de la obra y el primer pago se hace antes de firmar el convenio de servicios

*Los encargados de entregar los contratos sin importar que tengan un sobre costo son: Virgilio Crespo Méndez, director del INCCOPY y Sergio Chan Lugo, director del INCAY

*Las operaciones no se cierran en alguna oficina de Gobierno, sino en un predio ubicado en la colonia San Damián, cerca del edificio de la Secretaría de Educación Estatal, bunker personal de Virgilio Méndez Crespo

Redacción / Sol Yucatán

Un tridente corrupto opera al interior del Gobierno del Estado de Mauricio Vila Dosal. La red de mafiosos es comandado por Aref Karam Espositos, director de Obras Públicas y amigo personal de Vila Dosal.

Las dependencias involucradas son el Instituto para la construcción y Conservación de Obra Pública de Yucatán (INCCOPY), el Instituto de Infraestructura Carretera de Yucatán (INCAY).

Entre las tres dependencias manejan un presupuesto anual de cerca de 5 mil millones de pesos destinados a Obra Pública en Yucatán.

Como si fuera un verdadero cartel de mafiosos, las operaciones no se cierran en alguna oficina de Gobierno sino que, de acuerdo con investigaciones del Sol Yucatán, se cierran en un predio ubicado en la colonia San Damián, cerca del edificio de la Secretaría de Educación Estatal, bunker personal de Virgilio Crespo Méndez.

El cerebro del tridente es Karam Espositos, quien es el encargado de invitar y negociar con los dueños de empresas constructoras.

De acuerdo con uno de los informantes, a las empresas seleccionadas se les ofrece contratos de obra pública por un monto mínimo de 5 millones de pesos.

Las adjudicaciones son de manera directa o bien por invitación directa, nunca son por licitación pública.

A los constructores se les cobra entre el 15 y 20 por ciento del costo de obra, es decir, un monto mínimo de 750 mil pesos si se tiene en cuenta que los montos mínimos son de 5 millones de pesos.

La mitad del dinero del “moche” se entrega el día de la firma del contrato y el resto cuando el gobierno del estado transfiera parte del recurso.

En muchas ocasiones para recuperar el dinero del soborno se hace una obra con materiales de menor calidad o bien se les paga un sueldo menor a las personas que trabajan en los proyectos.

Las constructoras que no aceptan las condiciones son enviadas a la lista negra y se les asigna pequeñas obras o simplemente son borrados de la lista de proveedores de la administración estatal.

Los encargados de entregar los contratos sin importar que tengan un sobre costo, son Virgilio Crespo Méndez, director del INCCOPY y por Sergio Chan Lugo, director del INCAY, ya que ambas dependencias son las que manejan la obra pública de Yucatán y por lo tanto los recursos.

Una de las empresas del clan de Karam Espositos es ARQUITECTURA MODERNA, S.A. DE C.V, del arquitecto Carlos Quesnel Moguel, con domicilio en Nuevo León.

De acuerdo a la Plataforma Nacional de Transparencia, desde la llegada de Aref Karam a la titularidad de Obra Pública esta empresa ha sido favorecida con cuatro contratos por un monto de 37 millones de pesos.

Hasta antes de esa fecha esta empresa no figuraba en la lista de proveedores del Gobierno Estatal y por lo tanto no tenía asignado ningún contrato.

La empresa fue fundada el 13 de abril del 2021, el notario público número 12 Roberto José Ponce Montemayor fue quien realizó la constitución de la empresa, cuyo único socio es precisamente Quesnel Moguel.

Un año más tarde, es decir, en julio del 2022 recibió su primer millonario contrato. Le fue asignado un contrato por la cantidad de 29 millones 398 mil 961 pesos por la elaboración del plan del parque de la Plancha. Un gasto que se considera innecesario debido a que el proyecto lo llevaba a cabo ingenieros del Ejército Mexicano.

El contrato fue a través del Instituto para la Construcción y Conservación de la Obra Pública de Yucatán, cuyo titular es Virgilio Crespo Méndez, amigo incondicional de Karam Espositos.

Por su parte, la maestra Marisol Canto Ortiz, ex consejera de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos e integrante de la agrupación “Ya Basta”, indicó que precisamente el actual gobierno es opaco en la rendición de cuentas, sobre todo en Obra Pública.

La activista aseguró que durante la administración de Vila Dosal en Obra Pública todos los contratos han sido por adjudicación directa o bien por invitación directa, estas dos formas son la principal forma de corrupción.

Indicó que el principal problema que hay en Yucatán es que prevalece la impunidad en los temas de corrupción.

Carlos Ramírez Aguilar y Francisco Gallo Palmer, presidentes estatal y nacional de la AMIC, habían denunciado que funcionarios del Gobierno del Estado cobraban hasta el 30 por ciento en moches

Indicó que los “moches” variaban en un 20 y hasta un 30 por ciento del costo de la obra, lo que aunado al pago de impuestos y de las obligaciones con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) quedaba un margen menor para la construcción con baja calidad de los materiales.

Señalaron que el Gobierno hace negocio con las grandes empresas o empresas fantasmas montadas con prestanombres donde los verdaderos dueños son funcionarios públicos o sus familiares.