LOS LEONES, CON UN EQUIPO PODEROSO EN EL “DIAMANTE” CELESTIAL

Por GASPAR A. LÓPEZ POVEDA, de Arroba deportes

En estas fechas, en la que los mexicanos celebramos a la muerte, ¿qué le parece recordar a algunos peloteros de los Leones que ya se nos adelantaron?

Para ello, integraré una alineación de peloteros, incluso dirigentes y cronistas, que ya fallecieron, pero que llevaron a Yucatán y a los Leones en el corazón y lo proyectaron a grandes alturas. Comencemos:

Para la receptoría escogí a PEDRO BAZÁN, pundonoroso cátcher de los Leones campeones de 1984. Ponga en su lugar, si usted prefiere, a Roberto “Musulungo” Herrera, al motuleño Hervé Montañez o, aunque estuvo poco tiempo en el club, a Carlos “Gato” Gastélum, quien falleció en Mérida en plena serie de campeonato de la Zona Sur en 2005.

No lo olvidé y bien podría ser el máscara titular de este equipo melenudo “del más allá”, a León Kellman, quien en 1957, cuando las fieras izaron su primer banderín, bateó para .309, con cinco jonrones y 57 carreras impulsadas en 104 encuentros.

El histórico WÍLLIAM BERZUNZA LEÓN sería el primera base de esta novena, con la que intervino como jugador en las tres etapas del club. Incluso, a su faceta de pelotero, agregue que fue también integrante del cuerpo técnico (1979) y comentarista de radio en los encuentros de las fieras.

Creo que un buen suplente bien podría ser el ex yanqui de Nueva York GEORGE SCOTT (271 jonrones en las Mayores), a quien incluiremos como bateador designado. Otro que podría estar en la inicial en este equipo estelar de melenudos ya fallecidos, es el progreseño Zacarías Auais.

Para la intermedia escogimos a LEOBARDO GUERRERO. El “Cañón” de Pacabtún fue el pelotero de más impacto en el arranque de la actual tercera época del equipo. No olvide en esta posición al vallisoletano Antonio “Negro” Aguilar ni a Pepe Bache, mi compañero de “shopping” en Fort Lauderdale, Florida, en 1981.

Aunque FERNANDO VILLAESCUSA, inolvidable capitán y mánager del equipo, es más recordado por sus actuaciones en la intermedia (incluso, esa posición jugó en la campaña de 1984 cuando las fieras obtuvieron el segundo título de su historia), el sonorense llegó a los melenudos como torpedero, posición en la que lo colocamos en esta novena de astros fallecidos de los Leones.

En esta posición, dominada históricamente por yucatecos, podría estar sin desentonar Jesús “Chucho” Rejón.

Dos yucatecos están en mi mente para la antesala: FERMÍN “BURBUJA” VÁZQUEZ y Pedro Comas. Mi elección es “Burbuja”, quien es miembro del Salón de la Fama del Béisbol Mexicano.

Para los jardines, incluí una tercia de respeto: ÁNGEL “CUCO” TOLEDO, RAY TORRES y ED ARMBRISTER. Toledo, con su velocidad y buenos contactos (logró 45 estafas y 70 cuadrangulares en cuatro campañas con los Leones), con 17 homeruns y 17 hurtos en 1955. Fue el máximo ídolo de la afición hasta que llegó Ray Torres en 1984.

Torres sigue vigente hasta hoy gracias a los 210 cuadrangulares que atizó con los selváticos en su carrera y por ser el comandante de la gesta de 1984, cuando Yucatán se coronó ante los Indios de Ciudad Juárez.

El debut del ex rojo de Cincinnati, Ed Armbrister, con la novena local fue electrizante: cuadrangular con las bases llenas en el Parque Carta Clara en 1979 ante los Cafeteros de Córdoba, con Fernando Valenzuela en la loma de los Leones.

Domingo Cruz de la O, Albino Díaz, “Charolito” Orta, Óscar Garmendía (primer piloto de los Leones en la historia) y Pepe Rodríguez son otros guardabosques que ya se nos adelantaron, que vistieron la franela yucateca.

Para el pitcheo, que me perdonen, pero me salió lo yucateco: como abridor José “Indio” Peraza Solís (quien inició y ganó el primer partido de los Leones en la historia), y como relevistas situacionales al zurdo Juan Burgos y a los derecho Javier “Escopeta” y Agusto “Cuxo” Martínez.

Lo siento por Ernesto “Chico” Morillas y Rodolfo “Mulo” Alvarado, espléndidos lanzadores de la primeta época del club.

Creo que no habrá polémica cuando presente al presidente de este equipo que brilla, como los Leones actuales, en el “panteón de los recuerdos”. Escogí a don Gustavo Ricalde Durán, pero no dejo de reconocer lo que en su momento hicieron don Humberto Abimerih y Abimerih (trajo la franquicia a Yucatán en 1954), Pepe Osorno, Romeo Magaña Carrillo (titular de los Leones campeones de 1984) y el ingeniero Jesús Medrano Arrieta. La franquicia le debe mucho a don Gustavo.

Por coincidencia, tres de los cuatro presidentes de los Leones campeones ya entregaron su alma al Creador: Humberto Abimerih, campeón en 1957, Romeo Magaña Carrillo, monarca en 1984, y Gustavo Ricalde Duran, campeón en 2006.

Otros puestos en este nostálgico, hipotético equipo, serían cubiertos por las siguientes personas:

MÁNAGER: Wilfredo Calviño.
COACH: Leonel “Coronel” Aldama Rosel.
GERENTE DEPORTIVO: Tomás Herrera Olachea.
GERENTE DE VIAJES: Pedro Cortés Alcocer.
MASAJISTA: Ángel González.
BATBOY: Dimas Calderón.

Y si me apuran con un cronista viajero, el puesto es para el inolvidable Russell Gutiérrez Canto, con el “Primo” Abraham, “Landoro”, “George White” y Pedro José Rosado Sélem en las transmisiones radiofónicas desde Mérida, y “Juan Fanático (don Carlos Menéndez Navarrete), “George Squeezeplay” (ingeniero Jorge Menéndez Torre), Eduardo J. Valdez Suárez y “Juan Brea (QFB Felipe Escalante Ruz) en las notas periodísticas.

En el caso del mánager, me quedé con Calviño en vez de Óscar “Barriguilla” Rodríguez, único de los timoneles campeones (1957) que ha fallecido, aunque no fue monarca, pero sí le dio personalidad al equipo.

Seguro usted, amable lector, tiene una mejor opinión.

Mientras la piensa, recordemos con respeto y admiración a estos héroes con bombachos que emocionaron a los yucateco en el diamante terrenal.