SE APAGÓ LA ÉPOCA DE ORO

*Hace falta más promotores como don William Abraham Dáguer, Gonzalo “Fayo” Solís y Alberto “Beto” Eljure que dedicaron toda su vida con y pasión a la búsqueda de jóvenes promesas que destaquen en el mundo del boxeo

*Entrenadores comprometidos, disciplinados y éticos como Jesús “Cholaín” Rivero, Edilberto “Beto” Rivero Segovia y más espacios para practicar este deporte, como el emblemático Gimnasio San Francisco de Asís, “Cuna de Campeones”, son indispensables

Redacción /Sol Yucatán

Se acabaron los grandes promotores y también el surgimiento de nuevas leyenda del boxeo y por el momento no se futuro. En los municipios del Estado y en algunas colonias de la Ciudad de Mérida en los últimos años no se han producido peleadores de la talla de los campeones del mundo como Miguel Canto Solís, Gustavo “Guty” Espadas, Guadalupe Madera, Juan Herrera y Freddy “Chato” Castillo por citar a algunos.

Lo anterior puede deberse en cierta forma a la falta de promotores como lo fueron William Abraham Dáguer, Gonzalo “Fayo” Solís y don Beto Eljure, así como entrenadores que trabajen con los interesados desde muy pequeños para desarrollar las capacidades y forjar a las futuras estrellas, como lo hiciera Edilberto Rivera Segovia, quien transmitió su experiencia y conocimientos sobre el deporte desde sus inicios a por lo menos tres boxeadores que terminarían por convertirse en campeones mundiales.

Otro de los factores que puede estar afectando para la aparición de nuevas figuras de la fistiana local es la falta de más gimnasios como el San Francisco de Asís, del cual salieron varias figuras del deporte de los golpes y donde Rivera Segovia formaba pugilistas.

El 8 de enero del año de 1931 nació don William Abraham Dáguer en el municipio de Halachó, Yucatán.

Fue fundador precisamente del gimnasio San Francisco de Asís, que con el paso del tiempo se convirtió en un auténtico semillero productor de monarcas locales.

Uno de los boxeadores con el que más convivió es Gustavo “Guty” Espadas Cruz, quien tiene buenos recuerdos del promotor.

El 15 de marzo de 1997 entró al Salón de la Fama de la Comisión Mundial de Boxeo y falleció el 30 de abril de 2005 de diabetes y de problemas cardiacos.

Tanta fue la influencia con los peleadores yucatecos, que finalmente lo verían como un familiar o un padre incluso.

Otro recordado promotor de Box y Lucha Libre, fue el indiscutible Gonzalo “Fayo” Solís, quien en el año de 2019 fue entronizado en el Salón de la Fama del Deporte Yucateco.

El “Fayo” Solís destacó por la cantidad de boxeadores y luchadores a los que promovió y apoyó hasta que ya no pudo hacerlo debido a sus enfermedades.

Organizó innumerables funciones en lugares como el extinto Parque Carta Clara y la Plaza de Toros Mérida, tanto de boxeo como de lucha libre.

Apoyó incansablemente al boxeo amateur promoviendo las carreras de muchos pugilistas yucatecos que un futuro brillarían intensamente y que lo recuerdan con cariño y respeto, comprobando la falta que hacen promotores de su calibre.

Otro de los principales impulsores del box yucateco fue el inolvidable don Alberto Eljure Sesín incansable promotor que cada semana llevaba a cabo sus funciones de box con peleadores locales en San Juan de donde salieron los boxeadores legendarios como Miguel Canto Solís, Gustavo Espadas Cruz y Freddy “Chato” Castillo situación que es muy difícil que suceda en la actualidad.

Hablado de entrenadores no debemos olvidar al legendario Jesús “Cholaín” Rivero tuvo una vida profesional en los gimnasios y en la esquina de los cuadriláteros transmitiendo sus conocimientos del pugilismo a peleadores a los que generalmente llevaba a lo más alto del deporte de los puños.

Merecidamente es miembro del Salón de la Fama del Deporte Yucateco y tuvo entre sus pupilos ni más ni menos que al yucateco Miguel Canto Solís a quién pulió con dedicación y esmero para convertirlo en el esgrimista que deslumbró a propios y extraño.

Estiró todo lo que pudo su carrera de entrenado y fuera de Yucatán estuvo a cargo de Óscar de la Hoya mostrando el amor que le tiene a este deporte.

Edilberto “Beto” Rivero Segovia era un entrenado muy profesional y disciplinado, que imponía dedicado en cuerpo y alma a forjar a los nuevos valores con talento suficiente como para brillar en el deporte del boxeo. En casa, el gimnasio San Francisco de Asís, fundado por don William Abrahan Dáguer pasó gran tiempo de su vida transmitiendo sus conocimientos y dándoles consejos a sus pupilos de cómo debían comportarse dentro del ring, pero también fuera de cuadrilátero, ya que para  él era fundamental tener una vida ordenada y disciplinada para poder tener éxito en esta emocionante pero difícil profesión.

En síntesis esto justifica la necesidad que se tengan más entrenadores de este tipo para que contribuyan a que el boxeo yucateco recupere el brillo intenso que alcanzó en su Época de Oro, de la que fue parte el Legendario Gimnasio San Francisco de Asís, una auténtica Cuna de Campeones, por lo que también es de vital importancia que a la par de la generación de entrenadores se funden más gimnasios para participar más activamente en el resurgimiento de esta electrizante actividad en el Estado de Yucatán.