¡QUIENES TRAICIONARON A TRABAJADORES ACTIVOS Y PENSIONADOS!

LOS JUDAS DE YUCATÁN

*Ocho son los verdaderos culpables de la depredación de los bienes del ISSTEY, debido a que son los encargados de aprobar la venta de propiedades para beneficiar a amigos del gobernador

*En lo va del gobierno de Vila, se han vendido al menos unas 20 propiedades del Instituto de Trabajadores del Estado, sin embargo, los recursos obtenidos han ingresado de manera directa a las arcas del Gobierno Estatal y no del Instituto.

* Investigaciones de Sol Yucatán revelan que Mauricio Vila está haciendo negocios con las propiedades del Gobierno del Estado, para favorecer a amigos empresarios
Redacción/Sol Yucatán

Ocho son las personas consideradas como los judas de Yucatán, debido a que igual como lo hizo los personajes bíblicos, los funcionarios públicos y líderes de trabajadores traicionaron la confianza de los yucatecos.

Son los responsables de la depredación de los bienes del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado de Yucatán (Isstey).
Estas personas conforman el Consejo Directivo, quienes son los encargados de las decisiones importantes que involucran al Instituto de los trabajadores de Yucatán.

El Consejo está conformado por el gobernador, Mauricio Vila Dosal; la Secretaria General de Gobierno, María Fritz Sierra; el Secretario de Educación, Liborio Vidal Aguilar; el Secretario de Desarrollo Social, Roger Torres Peniche; el Secretario de Administración Fiscal, Roberto Suárez Coldwell; el líder sindical de maestros, Emmanuel González Chávez y el líder sindical de los trabajadores al servicio del estado, Jervis García Vázquez y el director general del Isstey, José Arturo Sánchez Martínez.

Estos funcionarios públicos, todos allegados al gobernador Mauricio Vila, son los encargados de la toma de decisiones.

De acuerdo al Diario Oficial del Estado, las funciones que realiza el Consejo es la de planear las operaciones, decidir las inversiones, conceder, modificar o retirar pensiones, sin embargo, también es quien decide vender los bienes propiedad del instituto y por ende de los trabajadores.

Esto debido a que los bienes inmuebles, muebles y activos, han sido adquiridos a lo largo de los años con las cuotas sindicales o bien han sido donados para el beneficio de los trabajadores.

Durante los poco más de 5 años de la administración de Vila Dosal, el Gobierno, con el respaldo del Consejo, ha vendido al menos unas 20 propiedades del Instituto de Trabajadores del Estado, sin embargo, los recursos obtenidos han ingresado de manera directa a las arcas del Gobierno Estatal y no del Instituto.

De acuerdo con el presupuesto de ingresos del Gobierno del Estado, el Poder Ejecutivo en su paquete fiscal estimó un ingresó por concepto de la venta de bienes y servicios la suma de 3 mil 95 millones 397 mil 44 pesos.

En específico, del Isstey obtendrían el monto de 146 millones de pesos 755 mil 129 pesos, por la venta de bienes y la renta de las habitaciones del hotel Costa Club propiedad del instituto, ubicado en el puerto de Yucalpetén.
Sin embargo, la mayoría de los recursos los obtendrían por la venta de bienes inmuebles, debido a que el renovado hotel permanece semi vacío la mayor parte del año.

De acuerdo con la Asociación de Hoteles de Yucatán, el promedio de ocupación del Hotel Costa Club es del 40 por ciento, por lo cual no significa un gran negocio para el Instituto, es decir, sus costos de operación serían superiores a sus ingresos.

Esto debido a que el mismo Consejo lo hizo inaccesible para los propios empleados del Gobierno Estatal, ya que ellos aprobaron el incremento de los costos de alquiler de las habitaciones en más del 100 por ciento.
El precio de la habitación por noche la más barata es de 1 mil 750 pesos con capacidad para dos personas.

Asimismo, el acceso al parque recreativo tiene un costo de 35 pesos por persona, cuando antes era gratis para los sindicalizados.

Difícilmente un empleado promedio con un sueldo de 10 mil pesos, que es lo que gana la gran mayoría de los empleados estatales, podría pagar unas vacaciones en el centro que fue remodelado con sus cuotas sindicales.

Investigaciones de Sol Yucatán dieron a conocer que Mauricio Vila Dosal está haciendo negocios con las propiedades del Gobierno del Estado, para favorecer a amigos empresarios.

Por medio del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado de Yucatán (Isstey) “remató” el edificio donde por años funcionó el centro comercial del Instituto, localizado sobre la calle 60 entre 47 y 49, a tan solo una esquina del Remate de Paseo de Montejo.

La operación se realizó el 8 de septiembre del año pasado, como consta en la escritura pública número 902, firmada por José Arturo Sánchez Martínez, Director General del Isstey, donde el inmueble de cerca de 10 mil metros cuadrados fue vendido a la empresa “Grow Import, Sociedad Anónima promotora de inversión de capital variable”.

La operación fue por la suma de 38 millones de pesos, un precio muy por debajo de su valor real, debido a que a la inmobiliaria “Inmuebles24”, el metro cuadrado en esa zona tiene un valor de 35 mil 500 pesos, esto debido a su ubicación geográfica.

Por lo cual, el valor comercial del edificio del Isstey, de acuerdo con el tabulador inmobiliario de esa zona, sería de al menos 350 millones de pesos, es decir, el predio se habría vendido un 900 por ciento menos de su valor comercial, según los tabuladores inmobiliarios.

La transacción fue avalada por el abogado Hugo Wilberth Evia Bolio, titular de la notaría pública No. 69, quien ha estado acusado de pertenecer a la mafia inmobiliaria, en la que el mismo gobernador estaría involucrado.

Otros de los inmuebles que están a punto de ser vendidos son los edificios del mismo instituto que se ubica en la calle 61 entre 54 y 56 del centro de Mérida y en la 67 entre 52 y 54 del centro donde funcionaran tiendas del Instituto.