Directora de la Normal Superior protege al catedrático que no mantiene a su hijo

El año pasado la funcionaria entregó documentos falsos a los egresados de la Ensy

MÉRIDA, Yucatán.- La directora de la Escuela Normal Superior de Yucatán (Ensy), María Consuelo Gómez Manzano, protege al catedrático Ammurhaby Aguilar, quien es deudor alimentario ya que se niega a pasar la manutención de su hijo menor de edad.

Ayer publicamos que el sujeto, quien tiene maestría y doctorado, no hace honor a su nombre, pues en la antigua Babilonia el Código de Hammurabi se usaba para impartir justicia. Es de hecho el código de justicia más antiguo que se conoce.

Desde hace cuatro años el individuo se separó de su esposa, con la que tuvo un hijo actualmente de ocho años. Pese a que gana más de 30 mil pesos, de acuerdo con el tabulador de salario para catedráticos de las escuelas normales, apenas aportaba mil pesos a la semana para la manuteción.

Al enterarse que su ex pareja quiere tramitar el divorcio para que se establezca una manutención acorde con la ley, el sujeto dejó de dar dinero pues dijo que va a esperar a que resuelva el caso para que le asignen la cantidad que debe pagar.

El tipo quiere llegar a una conciliación pensando que de esa manera puede conseguir una pensión alimenticia menor a la que marca la ley, la cual debe fijarse de acuerdo con el nivel de vida que tenía el hijo menor de edad cuando estaba conformado el núcleo familiar. Es decir, que si el niño iba a una escuela particular y tenía seguro de gastos médicos mayores, esto debe mantenerse.

Por lo pronto el sujeto se siente muy seguro, pues cuenta con la protección de la directora de la Ensy, María Consuelo Gómez Manzano, quien en octubre del año pasado se enfrentó a protestas de egresados porque no les entregaba los documentos que los acreditan como licenciados en educación.

Para zafarse del problema, la directora de la Ensy entregó documentos carentes de validez y sin el código QR para que los egresados puedan descargarlos.

Todo indica que esta funcionaria se caracteriza por pasar encima de la ley, pues actualmente los deudores alimentarios tienen restricciones para que no sigan dejando sin comer a sus hijos menores de edad.