Policía
Anexos de la muerte
Las calles para vender golosinas y productos de limpieza.
El lugar es una casa de fraccionamiento habilitada como centro de rehabilitación contra las adicciones, en especial droga, recibe internos del Sur de Mérida, de Kanasín, así como municipios como Acanceh, Tecoh, Umán y Progreso.
No cuenta con servicio de agua potable, por lo cual los servicios sanitarios no operan.
La “madrina” o directora es Ámbar Euán Peralta, que se pudo averiguar es funcionaria del Ayuntamiento de Kanasín.
Otro caso, es el centro de rehabilitación “Vida Yucatán”, el cual, aunque cuenta con permiso de la CONADIC, aunque no para funcionar como albergue, cobra cuotas más altas a las que tiene reportadas ante la dependencia Federal.
De acuerdo a la página de la CONADIC, el lugar tiene una cuota de 5 mil pesos anuales para el tratamiento de las adicciones, sin embargo, de acuerdo a familiares de internos en el lugar tiene que cubrir una aportación semanal de 2 mil pesos, es decir, 8 mil por mes y 96 por mil pesos por año, lo que equivale al mil 820 por ciento más de lo que tiene reportado al CONADIC.
Además, el lugar recibe aportaciones deducibles de impuestos y los internos realizan actividades productivas para la recaudación de dinero.
Una de las ex internas, que actualmente tiene interpuesto una denuncia por abuso sexual contra el director, indicó que ellos vendían chocolates en plazas comerciales y cruceros de la ciudad para la recaudación de fondos, asimismo otros realizaban boteos, esto como parte de su programa de rehabilitación.
El lugar, hasta el mes pasado, antes de que se desencadenaran una serie de acusaciones de índole sexual y maltrato físico, tenía 35 miembros.
El director del centro de rehabilitación “Vida Yucatán”, Marco Antonio Rosales Guzmán, está siendo investigado por abusos tanto físicos como sexuales.
Asimismo, es señalado como la persona que le dio una sobredosis de droga a uno de los internos y que le causó la muerte hace un mes.
En el centro de rehabilitación “Monte Cristo” se registró un homicidio donde un grupo de tres internos bajo los efectos de las drogas asesinó a otro interno, los sujetos lo ataron de pies y manos y luego lo mataron a golpes.
En el anexo “Sangre Renovadora”, ubicado en la colonia Francisco Villa Oriente en Kanasín, un grupo de jóvenes, entre ellos menores de edad, que se encontraban en rehabilitación denunciaron que fueron víctimas de abuso sexual por parte Omar H.L., mejor conocido como “padrino”, quien era el director del anexo.
Las víctimas relataron que sufrían abusos físicos y sexuales y que las manipula psicológicamente para que crean que era parte del proceso de rehabilitación.
En el anexo “Un Nuevo Comienzo”, ubicado en Xelpac, en Kanasín, un interno murió luego de que le clavaron un pico en la cabeza, el asesino estaba bajo los influjos de las drogas.
La semana pasada salió a la luz pública el homicidio de un hombre, interno de un anexo ubicado en Kanasín, se supo luego de que falleció a las puertas del hospital de ortopedia de la Cruz Roja en el Oriente de Mérida.
Tras le necropsia se supo que la causa de la muerte fue por traumatismo craneoencefálico, el caso está bajo investigación y por sigilo de la investigación, la Fiscalía no puede revelar mayores detalles.
