UMÁN: CRISTAL, FUERA DE CONTROL

*Los habitantes de la comunidad están preocupados por el aumento delictivo en las calles y en las casas, junto con el peligro a la salud de niños y jóvenes, esto es por el aumento de compra – venta de drogas sintéticas en las calles.

* El presidente municipal, Gaspar Ventura Cisneros Polanco junto con las autoridades siguen sin atender a las denuncias de los padres de familia.

Guillermo Medina/Sol Yucatán.

Las drogas se han hecho presentes en el municipio de Umán, una de las drogas que más influencia tiene en la zona son las drogas sintéticas. Los lugareños han descrito al cristal como la más común de la localidad, justo por encima de la marihuana, ya que, por el tipo de reacción que ocasiona entre los consumidores ha provocado que la situación se salga de control.

Para los lugareños es común ver como durante la noche algunas personas y grupos de jóvenes ingieren estas drogas sintéticas en la vía pública o en los famosos “picaderos”. Lo que caracteriza a esta sustancia en particular es el daño que le ocasiona a sus consumidores y lo económica que puede llegar a ser, ya que los precios de este producto comienzan desde los $60 pesos mexicanos, un precio accesible para los que sufren de esta adicción.

El problema de esta droga sintética es que es altamente adictiva y al ser común entre varios consumidores, incrementa la posibilidad de que los jóvenes tengan fácil acceso a esta sustancia y se vuelvan consumidores frecuentes. Esto ha alertado a los padres de familia de la comunidad de Umán quienes temen que sus hijos e hijas se vuelvan adictas a esta sustancia, por lo que piden la intervención inmediata de las autoridades.

Cabe señalar que el consumo de sustancias ilegales, en algunos casos de la comunidad, se ha relacionado con el robo a casa habitación, debido a que los consumidores recurren a hurtar para poder tener dinero fácil. Esto ha hecho que varias personas de Umán se quejen de la inseguridad que a menudo se vive en el municipio, ocasionando así que la localidad tenga dos panoramas diferentes entre sus habitantes.

Uno de los habitantes, quien decidió guardar el anonimato, declaró sobre la situación de los consumidores de cristal en Umán, “aquí ya se está haciendo famoso el cristal, uno se da cuenta rápido quienes se están metiendo eso, lo primero que sientes es el olor, huele como a plástico quemado o no sé, no huele como a algo que se queme en las casas, el olor es muy fuerte y característico de esa droga”.

“De lo que tenemos miedo la mayoría es por nuestros hijos que están en la edad de conocer nuevas cosas, porque a pesar de que uno le diga que no haga las cosas las van a hacer, pero esa cosa es muy mala, yo conozco vecinas que la verdad han perdido a sus hijos por esa droga, como se envician, nunca vuelven a ser los mismos, muchos se quedan en el viaje y no vuelven a ser los mismos de antes”.

“Esa droga es muy barata y muy adictiva, con una sola vez que la pruebes quieres más, por eso hay mucha gente que se mete eso, porque es barata y los hace sentir especiales o no sé, pero mientras algunos se lo meten en la calle y eso no está bien, porque no miden si hay niños o mujeres embarazadas cerca”.

“Yo digo que los robos están pegados a la droga, porque el adicto ¿qué hace cuando ve que no tiene dinero? vende sus cosas, pero cuando ya vendió sus cosas para comprar droga, toma otras cosas que no son suyas para seguir comprando, es un cuento de no acabar y que se está volviendo común aquí en Umán”.