Deportes
KUKULCÁN, BÉISBOL PURO
* La casa de los Leones de Yucatán fue inaugurada el 23 de marzo de 1982, convirtiéndose en esa época, en uno de los parques más grandes, hermosos y funcionales de toda la Liga Mexicana de Béisbol
* Los Piratas de Campeche fueron las primeras víctimas de las Fieras en este primoroso diamante que alberga momentos históricos e imborrables como los cuatro títulos logrados en su maravilloso césped
* El parque de béisbol “Kukulcán”, el parque de la “Serpiente Emplumada” está listo para albergar las más grandes epopeyas, las más grandes hazañas, los momentos más dulces y los más amargos
Redacción/Sol Yucatán
Cursaba el sexto año de primaria en la escuela “Vicente Guerrero”, en el icónico Barrio de Santiago, cuando en el recreo, llegó a mí un diario. Este impreso tenía, como siempre, información de todo tipo, como hasta ahora ocurre. La clásica nota policiaca de robos, choques de vehículos y alguna que otra trifulca y el impactante asesinato de un ciclista que al término de la competencia fue acribillado a contra esquina de la antigua Quinta Iturralde. También estaba en su contenido que un político debería de dejar su cargo porque estaba senil y se necesitaba un cambio y muchas cosas más.
Lo que más me atrajo de esa edición es algo que me sorprendió. Desde muy niño escuchaba del Parque Carta Clara y fui a varios juegos acompañado de mi hermano mayor y de mi padre en silla de ruedas, a causa de dos embolias. Uno de esos juegos a los que fui lo disputaron los Leones y los Padres de San Diego.
Mi hermano me dijo cuando hacíamos la cola para entrar que los Padres eran un equipo de las Grandes Ligas, eso se me quedó grabado y cuando leí en la nota del periódico que ya estaba casi listo el maravilloso parque de pelota “Kukulcán”, donde describía el cronista que esta sería la catedral de la pelota caliente, a la altura de los mejores parques de la Gran Carpa. Vi las fotos de como iba quedando el inmueble y decidí que tenía que ir.
La casa de los Leones de Yucatán fue inaugurada el 23 de marzo de 1982, convirtiéndose en esa época, en uno de los parques más grandes, hermosos y funcionales de toda la Liga Mexicana de Béisbol, convirtiéndose en un espléndido escenario para eventos deportivos, culturales y musicales de todo tipo.
Su nombre es bello, desde el maya, hasta su traducción al castellano, Serpiente Emplumada, recinto que para los melenudos significaba de manera simple, “La Cueva”.
Los Piratas de Campeche fueron las primeras víctimas de las Fieras en este primoroso diamante que alberga momentos históricos e imborrables como los cuatro títulos logrados en su maravilloso césped, los cinco juegos de estrellas y, sobre todo, el único juego perfecto tirado en playoffs, por el serpentinero Óscar Rivera. Estos elementos muy pocos espacios los tienen.
Se impusieron los Leones en aquella jornada de estreno en la que el célebre Von Joshua, un ex de los Dodgers, igualó de manera dramática el juego con el primer jonrón de la historia, un grand slam que hizo encallar el buque de los Filibusteros cuando todos pensaban que el llenazo de más de 18 mil espectadores iba a vivir una fiesta con llantos.
Así se inició la vida del gran Kukulcán, al que, cuatro décadas después de esa increíble noche de apertura, se le sigue viendo como una joya notablemente brillante. No hay, desde la Ciudad de México hacia la tierra del faisán y del venado, un parque de pelota con tanta historia, y, sobre todo con tanta vida. Más allá del centro del país, especialmente en Norte y Pacífico, se cuenta con modernas joyas, estadios de vanguardia. Roberto Campa, quien cubrió la última Serie del Rey, dijo “este parque de ustedes tiene una historia única”.
Pero, como toda serpiente, al pasar de los años y con las nuevas necesidades y condiciones del entorno, ha tenido que cambiar de piel. Durante todo este tiempo, se ha remodelado para continuar siendo uno de los principales espacios donde los amantes del Rey de los Deportes puedan disfrutar cada ponche, cada cuadrangular, cada carrera y cada jugada espectacular, a plenitud, al filo de sus butacas.
Aunque se le hicieron algunas remodelaciones, fue la realizada en 2016, la que le permitió modificar notablemente la experiencia del aficionado por algo más cómodo, funcional y moderno. Actualmente cuenta con una superficie de césped natural, con 14 mil 917 butacas divididas en las zonas VIP, Central, Lateral, Alta y General, y los aficionados pueden disfrutar de sitios como la tienda de souvenirs y la explanada principal.
El parque de béisbol “ Kukulcán” , el parque de la “Serpiente Emplumada” está listo para albergar las más grandes epopeyas, las más grandes hazañas, los momentos más dulces y los más amargos, pero sobre todo esto, está listo para que el aficionado de hueso colorado grite a todo pulmón las victorias de sus queridos Leones de Yucatán, así como llorar sus derrotas.
La inauguración del recinto fue algo muy importante para los yucatecos.
El diamante siempre ha lucido con todo su esplendor.
Las butacas esperan ansiosa por ser ocupadas por los aficionados y que estos vivan al máximo la pasión del Rey de los Deportes.
Sin lugar a duda, la pasión y la afición por este deporte, en Yucatán, es inobjetable y magnifica.