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Impresionante hallazgo en Chichén Itzá
Arqueólogos que exploran esa ciudad precolombina encontraron un disco de piedra tallado en bajorelieve que tiene dos elementos: a) una banda con glifos que muestra un texto completo, y b) dos personajes ataviados como jugadores de pelota.
La pieza mide 32.5 centímetros de diámetro y 9.5 de grosor. Pesa 40 kilos. Se calcula que fue elaborada entre finales de los años 800 y principios de 900 después de Cristo.
Un boletín emitido por el INAH ayer lunes indica que fue encontrada por la arqueóloga Lizbeth Beatriz Mendicuti Pérez, en el grupo de edificios conocido como Casa Colorada o Chichanchob, ubicado entre el Observatorio y el Osario.
Esa escultura circular es parte de la Estructura 3C27, “la cual corresponde a un arco de acceso al área”. Estaba enterrada a 58 centímetros de profundidad, en posición invertida, lo que sugiere que formó parte del arco mencionado, el cual se derrumbó.
Casa colorada debió tener función religiosa y pública. Cuenta con cancha de juego de pelota con relieves de estilo maya-tolteca. La pieza mencionada funcionó como marcador de algún evento importante relacionado con esa actividad.
La banda con escritura maya mide seis centímetros de ancho, se compone de 18 cartuchos con una fecha de cuenta corta 12 Eb 10 Cumku, la cual apunta, tentativamente, al año 894 d.C.
Esa tira rodea a dos personajes ataviados como jugadores de pelota, de pie, frente a una pelota.
El personaje a la izquierda porta tocado de plumas y una banda que presenta un elemento en forma de flor, probablemente un lirio acuático. A la altura del rostro se distingue una voluta, la cual puede interpretarse como aliento o voz.
El de la derecha luce tocado reconocido como ‘turbante de serpiente’, cuya representación se observa en múltiples ocasiones en Chichén Itzá. El individuo usa protectores de juego de pelota.