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CELESTÚN: ROBAN TIERRAS DE 100 MDP
*En el segundo puerto más importante de Yucatán, presuntamente existe una mafia inmobiliaria controlada por la ex alcaldesa priista, Yulma García Casanova y por el alcalde panista, José Asunción Ramírez Perera, quienes controlarían una red de personas de Campeche y Tabasco que han invadido una zona de más de cuatro hectáreas
* Para comercializar los terrenos invadidos como lotes de inversión y para hacerlo más creíble se enseñan planas con sellos del Ayuntamiento, sin embargo no tendrían validez, ya que la propiedad no está inscrita en el Registro Público de la propiedad, por lo cual estarían incurriendo en fraude.
*La Profepa realizó una inspección al lugar durante la diligencia y detectaron que se taló y quemó la vegetación, además de haberse llevado a cabo la delimitación de los predios con mangueras, sogas, alambre de púas y postes de madera.
Redacción/Sol Yucatán
En Celestún, el segundo puerto más importante de Yucatán, existe una mafia inmobiliaria controlada por la ex alcaldesa priista, Yulma García Casanova y por el alcalde panista, José Asunción Ramírez Perera.
Los ediles controlan una red de personas que han invadido una zona de más de cuatro hectáreas de tierras en la naciente zona hotelera de Celestún.
El lugar, localizado en la zona poniente, cuenta con vigilancia las 24 horas del día de parte de los pobladores de la comunidad y por gente proveniente de Campeche y Tabasco, quienes están armados con machetes, se transportan en motocicletas y presumen estar pagados por los políticos.
Estas personas vigilan y siguen a todos los vehículos que ingresan a esas tierras para cerciorase de todo lo que hacen.
Según pobladores, estas personas han despojado de celulares y otros objetos a ciudadanos que han llegado para documentar la invasión, y a pesar de que se denunció el robo, la policía no intervino.
Sol Yucatán, como parte de su trabajo periodístico, acudió en días recientes a esa zona y constató la vigilancia y la intimidación por parte de los “paleros” contratados para el resguardo de este lugar.
El terreno tiene un valor estimado de más de 100 millones de pesos y se han apoderado de ellos con el pretexto de una invasión de paracaidistas.
Sin embargo, los que controlan a los paracaidistas son los presidentes municipales, debido a que han descubierto una importante fuente de ingresos.
El terreno ya lo tienen lotificado y lo venden como lotes de inversión a pesar de que el inmueble se encuentra sobre la carretera a menos de 100 metros de la playa.
Cerca se encuentra el hotel Xixim, el más importante de Celestún y se están construyendo otros hoteles, incluido el del alcalde panista Ramírez Perera, lo que catapultará la plusvalía.
Los lotes de terrenos se venden a través de las redes sociales y se publicitan con precios de oportunidad en una paradisiaca playa de Yucatán.
De acuerdo con investigaciones de Sol Yucatán, las tierras las intentaron vender a empresarios desarrolladores, sin embargo no les interesaron debido a que no cuentan con certidumbre jurídica, es decir que no cuentan con escrituras y por lo tanto no las pueden comercializar.
Ante esta situación, aprovechando el auge inmobiliario en Yucatán, los ediles priistas y panistas unieron fuerzas para organizar su propia red de mafia inmobiliaria en Celestún.
Para comercializar los terrenos invadidos como lotes de inversión y para hacerlo más creíble se enseñan planas con sellos del Ayuntamiento, sin embargo, no tendrían validez, dado que la propiedad no está inscrita en el Registro Público de la propiedad, por lo cual estarían incurriendo en fraude.
Es por ello que la policía no ingresa a ese lugar, ni tampoco se ha solicitado la ayuda de la Secretaría de Seguridad Pública para desalojar a los invasores.
El lugar presenta una devastación de flora nativa de la región, entre ellas mangle
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente realizó una inspección al lugar durante la diligencia, los inspectores observaron que en el lugar talaron y quemaron la vegetación, además de haberse llevado a cabo la delimitación de los predios con mangueras, sogas, alambre de púas y postes de madera.
Asimismo, se abrieron caminos con maquinaria.
Cabe mencionar que en los predios inspeccionados se encontraron ejemplares de mangle botoncillo (Conocarpus erectus), mangle negro (Avicennia germinans) y mangle blanco (Laguncularia racemosa), especies enlistadas en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, bajo la categoría de Amenazadas (A).
De acuerdo con la dependencia federal, la ley establece multa a la que podrán hacerse acreedores quienes lleven a cabo actividades de cambio de uso de suelo en áreas forestales sin la autorización de Impacto Ambiental correspondiente, pueden ser por el equivalente de 30 hasta 50 mil Unidades de Medida y Actualización.
Es decir, multa que va de los 3 mil 257 pesos a los 5 millones 428 mil 500 pesos.
Por otra parte, el Código Penal Federal establece en su artículo 420 Bis, Fracción II, una pena de 2 a 10 años de prisión a quien dañe, deseque o rellene humedales o manglares, sin los permisos de las autoridades ambientales y sin el impacto ambiental correspondiente.
A pesar de la clausura del lugar los invasores continúan talando la vegetación, quemando y vendiendo los lotes de terrenos, ya que detrás de este negocio redondo estarían los ediles a través de prestanombres.
No hay que olvidar que la alcaldesa priista Yulma, fue acusada de la venta de terrenos propiedad del municipio a precios irrisorios a integrantes de la mafia inmobiliaria costera, asimismo, al comienzo de su administración se dedica a la administración de sus molinos, sin embargo, actualmente tiene numerosas propiedades, lanchas y otros negocios.
Por su parte Ramírez Perera fue acusado por la Auditoría Superior del Estado por el presunto desvió de más de 21 millones de pesos del presupuesto asignado en el 2022.
De acuerdo con los pobladores de Celestún, la ex edil priista y el alcalde panista son de los presidentes municipales más corruptos que han detenido el puerto en los últimos años.
Aun así, el PAN designó a Ramírez Perera, como su candidato a la presidencia municipal.