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Cecilia, Tráfico de Influencias
- La virtual candidata del PAN a la alcaldía de Mérida es dueña de numerosas concesiones de taxis, tanto convencionales y de plataforma.También es propietaria de numerosos locales en el mercado “Lucas de Gálvez” y en el “San Benito”.
- Junto con sus hermanos Alejandro y José Antonio y de la mano del fallecido, Alfonso Pereira Palomo, adquirió grandes extensiones de tierras en el Norte de Mérida y en la costa
- Han abierto investigaciones por parte de autoridades nacionales e internacionales contra Alejandro Patrón Laviada, quien es investigado por la DEA . Renán Barrera desvía recursos para apoyar la campaña de la diputada
Redacción/Sol Yucatán
Cecilia Patrón Laviada, virtual candidata del Partido Acción Nacional (PAN) a la alcaldía de Mérida y principal carta del PAN a la gubernatura del estado en el 2030 amasa una gran fortuna hecha a expensas del poder de la familia Patrón Laviada.
La actual secretaria nacional del PAN es dueña de numerosas concesiones de taxis, tanto convencionales y de plataforma.
Asimismo, es propietaria de numerosos locales en el mercado “Lucas de Gálvez” y en el “San Benito”, así como de cascos de haciendas, donde operan hoteles tipo boutique.
Con información privilegiada, la diputada federal, al igual como otros políticos, ingresó al negocio del ramo inmobiliario.
Junto con sus hermanos Alejandro y José Antonio y de la mano del fallecido, Alfonso Pereira Palomo, adquirió grandes extensiones de tierras en el Norte de Mérida, así como en la costa, donde actualmente hay desarrollos inmobiliarios, cuya plusvalía se ha disparado.
Compraron hectáreas de tierras en la zona de Temozón Norte, Sac-nicte, Komchén, Cholul y Chablekal.
En la zona de Sisal, Celestún y Telchac tienen grandes extensiones de tierras las cuales venden a través de diferentes agencias inmobiliarias y de bienes raíces.
La clase política, incluso algunos panistas desde el anonimato, los señalan como beneficiarios de los gobiernos estatal y municipal del PAN.
Los Patrón Laviada especulan con bienes raíces, compran cascos de haciendas, venden autos a las alcaldías panistas, reciben beneficios de programas sociales, controlan permisos de taxis y mercados.
En una entrevista, el perredista Erick Villanueva Canul, aseguró que los Patrón Laviada han hecho negocio seguro, al obtener información privilegiada o catalogada como confidencial por parte del gobierno.
La diputada panista utilizó su cargo como directora de Relaciones Públicas en el Ayuntamiento de Mérida durante la administración de Manuel Fuentes Alcocer y cuando fue directora de Desarrollo Social durante la gestión de Mauricio Vila Dosal, actual gobernador de Yucatán.
Cecilia, a pesar de la poca preparación académica, ha logrado escalar peldaños en la política gracias al apoyo de su hermano Patricio Patrón, quien fue el primer panista que gobernó Yucatán y aún conserva un importante coto de poder al interior del PAN.
Sus otros hermanos están borrados de la política debido a que se han visto envueltos en escándalos, que incluso, han abierto investigaciones por parte de autoridades nacionales e internacionales, como es el caso de Alejandro, quien es investigado por la DEA y que ha gozado de protección, gracias al poder de Patricio, quien según las fuentes, pidió inmunidad para su hermano al actual gobernador, Mauricio Vila Dosal y ayuda a su hermana Cecilia, quien goza de información privilegiada, la cual utiliza para proteger a su hermano.
Cecilia tenía el camino trazado para ascender en la política al grado de que ya fue funcionaria estatal, municipal, dos veces diputada federal y en la próxima elección buscará la alcaldía de Mérida, con miras a ser la candidata del PAN a la gubernatura en el 2030.
La legisladora ha amasado una importante fortuna para financiar parte de su campaña, siempre con ayuda de los gobiernos panistas.
La actual diputada panista, corcholata del PAN a la alcaldía de Mérida, es la legisladora más faltista y que menos ha contribuido en la presente legislatura federal.
Al ser nombrada como secretaria nacional del PAN, gran parte de su tiempo lo ocupa para hacer política en todo el país.
La legisladora durante este 2023, es decir, su segundo año legislativo, no ha propuesto ninguna iniciativa a favor de los yucatecos, por lo cual, no justifica los 105 mil 378 pesos que gana al mes.
Como estrategia, apoya propuestas realizadas, en primera instancia, por diputados del PAN y recientemente del PRI y del PRD, quienes integran la coalición Frente Amplio por México.
Su falta de trabajo legislativo se evidenció en su segundo informe, el cual realizó en el “Poliforum Zamná”, donde la diputada derrochó grandes recursos.
Tan sólo para ese evento, la legisladora contrató la impresión de 3 mil 500 lonas tipo bandera, la impresión de 10 mil playeras y la renta de 200 autobuses, en los cuales se movilizaron 8 mil personas. El costo fue de 3.5 millones de pesos.
Se desconoce de dónde provienen los recursos que la legisladora está gastando para su campaña.
Ceci, como se le conoce en el mundo de la política, concentró su informe en los servicios que ha realizado a través de su esterilizador móvil y el programa “ponte chula”, cuyos recursos no están claros de donde provienen y se dice, que están siendo desviados del Ayuntamiento de Mérida, encabezado por Renán Barrera Concha.
El regidor priista, Gabriel Barragán Casares, ha dicho en reiteradas ocasiones que Renán Barrera ha desviado cientos de millones de pesos para su campaña.
Recientemente, Cecilia se “refritió” un programa de Liborio Vidal, donde hace rifas y dinámicas a través de sus redes sociales.
El amigo Libo, durante la campaña interna, rifaba artículos electrónicos y de cómputo para atraer adeptos, en cambio Cecilia, rifa motocicletas y cascos para motociclistas de la marca DOT.